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Crónica Vagos Metal Fest – día 2

14 de Agosto y Galiza Metal al completo nos preparábamos para disfrutar de  la segunda jornada de la I edición del Vagos Metal Fest. A Quinta do Ega ya rebosaba de público desde primera hora, pues el cartel de ese  día ofrecía bandas tan grandes como Helloween o Moonspell , estos últimos, como todos sabemos, dioses en Portugal y más allá de sus fronteras.

 

Calor en la tarde y para comienzo, una banda lusa del mismo Aveiro llamada Godvlad. ¡Que sorpresa tan grata! empezar con tanta calidad denotaba que el día prometía. Ellos se etiquetan como power, yo iría más allá. Melódica y preciosa la voz de Vanessa Cabral con una indumentaria fantástica entre ninfa y princesa del lejano oriente.

Su música limpia caracterizada por unos riffs de guitarra potentes ejecutados por Pedro Miranda, proporcionan fuerza, junto a  bases rítmicas dinámicas  y matizadas por teclas alegres  y protagonistas. Destacar también a Mané gran guitarra y a Sergio Carrinho grande a las cuatro cuerdas. ¡Excelente comienzo!

Otros portugueses en el escenario, esta vez venidos de Oporto. Su nombre, Heavenwood. Llevan desde el 92 dando guerra aunque su carrera ha sido un poco convulsa.

 

Metal sin más, diría yo, aunque ellos se  autodenominan  death, trabajado con combinación de voces gutural y melódicas, esta última muy destacable.

 

Doble bombo típico pero bien ejecutado y  punteos cañeros fueron el amalgama en esa tarde donde el público disfrutaba ya desde primera hora de la mezcla  de estilos dentro del género ofrecida en este evento. Concierto correcto con mucha fuerza en el escenario.

La oscuridad  envolvió Vagos nuevamente con la actuación de Tribulation.  Como decía en la anterior crónica, los suecos son los reyes en este estilo, lanzándose al lado más radical del género.

 

Intro atmosférica y espeluznante para comienzo de un  concierto que junto a  su indumentaria y maquillaje, fabricaban el ambiente perfecto para trasladarnos a lo más tétrico. La voz de ultratumba a manos del también bajista Johannes Andersson, marca los ritmos románticos y sobrenaturales de lo gótico, y junto a  la batería pesada  de Jakob y los riffs lentos de Jhonathan Hulten personaje increíble y andrógino, Tribulation se convierte en algo extraordinario.

 

Seguidores acérrimos a este género los defienden con uñas y dientes, teniendo  que reconocer que son bestias de escenario y decir también que  personalmente me cautivaron.

Atardecía en Vagos y los siguientes en pisar las tablas fueron una banda muy influyente en el hardcore punk inglés o Grindcore, estamos hablando de Discharge.

 

Larga y movida historia tienen estos ingleses que pasaron por diversos géneros en su trayectoria llena de cambios de  los integrantes de la banda también.

 

Son pioneros por su música, muy pesada de ritmos, con riffs altamente distorsionados y voz chillona donde junto a una actitud rebelde, despuntan como una de las bandas más seguidas e imitadas dentro de su estilo en los últimos tiempos.

 

El concierto de una hora revolucionó el ambiente y motivó al público más desatado.

La diversión llegó a manos de los finlandeses Finntroll. Como su nombre indica y la indumentaria utilizada por ellos para su actuación, parecían trolls salidos de una cueva para ejecutar una mezcla de Black Metal y Folk que denominan Humppa.

 

Curiosa la vertiente, haciendo vibrar el escenario del Vagos con ritmos rápidos y voz clara donde los orígenes del estilo quedan un poco en entredicho, pero quien dice que los finlandeses no pueden hacerlo.

Entrada ya la noche. Se respiraba impaciencia en el ambiente por ver ya a los cabezas de cartel de esta primera edición del Vagos Metal Fest. Helloween, banda consolidada como una de las mejores de la historia del Metal, llegaba para ofrecer una muy esperada actuación.

 

Soy del Helloween de los tiempos de Kiske, lo reconozco, pero  me quito el sombrero ante Andi Deris, gran sustituto y enorme frontman. Su interactuación con el público y entrega fue total repasando los últimos éxitos de un grupo  que a pesar de bruscos cambios y algún trabajo de estudio malogrado siguen en la brecha después de tres décadas.”Waiting for the Thunder” es la prueba entre otros temas, del regreso de Helloween a su sonido más puro y particular, ese sonido que nos cautivó a muchos, de riffs veloces y técnica instrumental más melódica que el thrash.

La actuación de esa noche estuvo arropada por miles de personas que disfrutaron la potente batería ejecutada por Dani Loble o del gran Michael Weikath.

Que mejor despedida de festival que con los enormes Monspell. Espidicos y acelerados después de Helloween, aún quedaban ganas y energías para dar la bienvenida a los amos del metal portugués. Género extremo en ejecución, entregado a un público enloquecido y fan acérrimo que los eleva al séptimo cielo y no es para menos.

 

Me encanta la mezcla de riffs sinfónicos y los matices doom con ese bajo pesado. Nos presentaron Extinc, su último trabajo de estudio lleno de notas al más puro death, trabajo que corrobora la variedad musical por donde se mueve la banda.

 

Se terminaba y con gran tristeza nos despedíamos del festival. Corto se nos hizo y solo quedaron ganas de que pase un año para poder volver a disfrutarlo otra vez. Después de publicar la primera parte de este gran evento, tuvimos noticias de que habría una próxima edición, la cual deseamos poder cubrir e informar a todos nuestros seguidores de los acontecimientos venideros.

Mis agradecimientos a la organización por las acreditaciones, a las bandas por su entrega, al público por su energía, a los técnicos por su profesionalidad y como no, a la gente de Vagos y Aveiro por ser tan cariñosos, atentos y amables dándonos un trato exquisito e increíble.  ¡¡Volveremos!!

 

¡¡Hasta la próxima!!

 

 

Texto: Patri G.

 

Fotografías: Nelly Varela

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